jueves, 20 de octubre de 2016

FAMILIA

En el mundo, podemos llegar a encontrar cientos, miles y millones de familias de todo tipo de clases, creencias y culturas, lo que tienen en común unas con otras es que como personas, tienen sentimientos, y como tal, quieren y respetan a los de su alrededor.

Normalmente, cuando llegamos a la edad tonta de los catorce, quince, dieciséis años, ya no queremos salir con nuestra familia, y preferimos el irnos por ahí con amigos y conocer a gente nueva, rechazando, por así decirlo, el cariño que te han dado desde pequeño.

Al pasar esa etapa, todo cambia, y es ahí cuando te das cuenta el gran apoyo que es tu familia y lo mucho que los has subestimado pero, todo el mundo tenemos errores, y, mejor remediarlos tarde que nunca y quedarte con la duda de "¿y por qué no lo hice?".

En algunas circunstancias, nuestra familia llega a ser nuestros amigos porque, hay situaciones, en las que nos entienden mejor ellos, que la propia familia, y eso no es malo, al contrario, es mejor tener confianza en alguien que no tiene tu sangre. A veces, es incluso difícil el confiar en gente extraña, pero siempre hay una primera vez para todo y si surge la oportunidad de conocer a gente nueva y que tenga buena personalidad ¿por qué no? Hoy en día, se suelen fijar más, en lo que es la apariencia física que en lo fundamental, como es la personalidad de uno mismo. Donde hay personalidad, que se quite lo demás.

En conclusión, una familia es lo más valioso que uno mismo va tener en su vida, cuida de ello porque no van a estar siempre.




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